Carolina del Norte, Raleigh- Dos semanas después de haber presentado un proyecto de ley que busca obligar a los alguaciles de Carolina del Norte a cooperar con el Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE), el representante republicano Destin Hall compartió un mensaje antiinmigrante en su cuenta de Twitter.
En un video de casi dos minutos de duración, Destin Hall responsabilizó al movimiento “woke” (término despectivo para llamar a los progresistas) y a los “extranjeros ilegales” por la inseguridad en Carolina del Norte.
“Lamentablemente muchos alguaciles ‘woke’ decidieron interrumpir su comunicación con las agencias federales del orden, poniendo el activismo político por encima de nuestra seguridad pública”. Fue lo que expresó el representante republicano.
La frase hace referencia a la negativa de alguaciles como Willie Rowe, líder de la fuerza en el condado de Wake, que se oponen a mantener detenidas a las personas con el único fin de consultar su estatus migratorio.
Justamente la HB 10, el nuevo proyecto de Destin Hall, ordena a los alguaciles consultar al ICE por la residencia legal de las personas arrestadas y acusadas de ciertos delitos. Además, exige mantener detenida a la persona por 48 horas, o hasta que el ICE aclare su estatus migratorio.
El mensaje antiinmigrante de Destin Hall
Además de responsabilizar a los alguaciles que no comulgan con la cooperación con el ICE, Destin Hall apuntó contra las personas indocumentadas, a quienes llamó “extranjeros ilegales”.
“Los extranjeros ilegales que cometen crímenes severos son protegidos de la deportación y liberados nuevamente a nuestras comunidades, donde con frecuencia continúan cometiendo más crímenes”. Fue lo que manifestó el representante republicano.
En esa línea, describió una serie de delitos supuestamente cometidos por una persona indocumentada. Afirmó que “las políticas de santuario son una amenaza para la seguridad de todas las personas que viven en Carolina del Norte”.
Por último, sostuvo que el proyecto HB 10 “le pondrá un freno” a esa clase de delitos en el estado.
Mientras tanto, organizaciones de la comunidad latina y grupos de base continúan protestando en contra del proyecto de Destin Hall. Consideran a la HB 10 como “racista” y “una amenaza contra la población inmigrante”.
Cabe anotar que el discurso de Hall no ofrece pruebas sobre sus afirmaciones.