Carolina del Norte, Durham – Un latino que se encontraba detenido en la Cárcel de Durham, falleció el jueves 30 de junio luego de un intento de suicidio según lo anunció la Oficina del Alguacil de Durham.
La identidad del detenido fue revelada por el alguacil, luego de contactar la familia del difunto.
Según la oficina del alguacil, Erick Antonio Cano-Castellanos, de 39 años, sin una dirección permanente, ingreso a la cárcel el viernes 3 de junio.
Castellanos murió en un hospital local. Fue encontrado por personal del centro de detención en su celda, tras intentar suicidarse.
Enlace Latino NC tuvo información de una fuente que indicó que el preso era de origen hondureño; y que había tenido realizado una llamada previamente a su intento de suicidio. También acerca de que quiso provocar su muerte colgándose de la manga de una camisa.
El hondureño estaba bajo arresto desde el 3 de junio, con una fianza asegurada de $3 millones. El 27 de junio un Gran Jurado en Durham lo culpó de dos cargos de incesto, un cargo de asalto a una mujer por estrangulación. Además de tráfico humano de un menor de edad, y servidumbre involuntaria de un menor.
Investigarán la muerte
Bajo la nueva "Ley de Reforma de la Justicia Penal" de Carolina del Norte, una agencia de aplicación de la ley puede solicitar a la Oficina Estatal de Investigaciones (SBI) que investigue cuando "una persona bajo la custodia del Departamento de Seguridad Pública, una prisión estatal, una cárcel del condado o una instalación de confinamiento local, independientemente de la ubicación física del individuo, muere".
La Oficina del Alguacil del condado de Durham solicitó al SBI que investigara además de la revisión requerida por el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Carolina del Norte (NCDHHS).
El alguacil Clarence Birkhead dijo en un comunicado que: "estamos esperando un informe final de ambas agencias mientras llevamos a cabo nuestra propia revisión interna. No se dará a conocer más información hasta que se completen estas investigaciones".
Con esta sería la muerte número 13 de un detenido de la cárcel de Durham desde 2011, según informes del News & Observer.
La última muerte en la cárcel ocurrió en abril de 2021. Joseph Bernard Hunter, de 35 años, se desplomó mientras era fichado en la cárcel después de ser arrestado el 15 de abril por un cargo de conducción en estado de ebriedad.
Brittany Kittrell, de 34 años, murió en enero de 2021, cuatro días después de ser arrestada.