La legislatura de Carolina del Norte, mejor conocida como la Asamblea General, tiene un procedimiento complejo para la creación de leyes, el cual está basado en la Constitución estatal.
Para que una propuesta se convierta en ley, debe leerse tres veces en cada cámara de la Asamblea, ser aprobada por ambas cámaras. Además, debe ser enviada al Gobernador.
Una propuesta de ley
Todo comienza con una propuesta o una idea, la cual puede ser sugerida por un ciudadano, una organización, una agencia estatal o un miembro de la Cámara de Representantes o del Senado.
El propósito de la propuesta es cambiar las leyes actuales o introducir una nueva ley”, explicó a Enlace Latino NC, el representante Harry Warren, republicano del Distrito 76 del condado de Rowan.
Introducción por patrocinador
Aunque cualquier persona puede sugerir una propuesta de ley, solamente un miembro de la Asamblea General puede presentar el proyecto ante los miembros de la Asamblea. Este miembro se convierte en el patrocinador del proyecto de ley.
Al ser sometido, la propuesta recibe un numero de identificación precedido de las letras HB (si inicia en la Cámara de Representantes) o SB (si inicia en el Senado).
En todos los casos “puede haber hasta cuatro miembros de la cámara de representantes o del Senado que son los patrocinadores principales de un proyecto de ley”, explicó Warren.
Primera lectura en la cámara de origen
El patrocinador de la propuesta de ley tiene que presentarle el proyecto al Secretario Principal, un día antes de que sea leído en su cámara de origen, ya sea en la Cámara de Representantes o en el Senado. Una vez que es leído, el proyecto es asignado por el presidente de esa cámara a un comité.
Análisis en comité
Cuando el proyecto de ley llega al comité asignado, los miembros de este comité pueden hacerle cambios o enviar el proyecto a otros comités.
De acuerdo con la Escuela de Gobierno de la Universidad de Carolina del Norte, “si el comité aprueba el proyecto de ley, le asigna una fecha en el calendario de la cámara de origen para que pueda volver a ser considerado por todos sus miembros”.
Segunda y tercera lectura en la cámara de origen
Después de ser aprobado en comité, el proyecto regresa a su cámara de origen donde se discute, se lee dos veces más y es sometido a una votación.
Si se aprueba en su cámara de origen, el proyecto es enviado a la otra cámara de la Asamblea.
La segunda cámara
Cuando el proyecto de ley llega a la segunda cámara, el proyecto es sometido al mismo proceso por el que pasó en su cámara de origen.
Solo si el proyecto de ley es aprobado por el comité en la segunda cámara, si es leído tres veces y si recibe votación definitiva, el proyecto de ley se manda otra vez a la cámara de origen para ser ratificado.
Generalmente, la segunda cámara termina haciéndole cambios al proyecto de ley, los cuales deben ser aprobados por la cámara de origen.
En este caso, el proyecto se manda otra vez a la cámara de origen y si esta cámara aprueba los cambios, el proyecto esta listo para ser firmado como ley y ser enviado al gobernador.
Comité de Conferencia
Si la cámara de origen no está de acuerdo con los cambios, los presidentes de cada cámara pueden crear un comité de conferencia para reconciliar las diferencias entre las dos versiones del proyecto de ley.
En el caso de que el comité de conferencia llegue a un acuerdo, las dos cámaras votan el texto recomendado.
Si cualquiera de las cámaras rechaza la recomendación del comité de conferencia, los nuevos miembros del comité de conferencia pueden hacer otra recomendación. De lo contrario, el proyecto de ley se muere.
La oficina del Gobernador
Cuando el proyecto de ley llega a ser ratificado por las dos cámaras de la Asamblea General, se envía al gobernador.
El gobernador tiene tres opciones: puede firmar, no tomar ninguna acción, o vetar el proyecto de ley. Si el gobernador no firma el proyecto en 10 días, automáticamente se convierte en ley. Por otra parte, si el gobernador lo veta, el proyecto regresa a la Asamblea General.
Para anular el veto, el proyecto debe obtener una votación favorable de una mayoría de tres quintas partes en las dos cámaras. Si esto ocurre, el proyecto se convierte en ley. Si no ocurre, se mantiene el veto.