Al menos 28 inmigrantes han sido arrestados por inmigración en Carolina del Norte, desde el domingo 2 hasta el jueves 6 de junio.
En números
Aunque sin cifras oficiales por parte del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE, por su sigla en inglés), organizaciones de defensa comunitaria como Siembra NC, anunciaron la mañana de este jueves la detención de 17 inmigrantes. Siete de ellos fueron detenidos en Charlotte, cuatro en Winston Salem. Además de tres en Raleigh, dos en Fuquay -Varina, uno en Burlington y uno en Greensboro.
Por su parte, la cadena de noticias local Univision 40 reportó, el arresto Enio Bernardino Rodríguez, nacido en Honduras. El arresto ocurrió sobre la calle Capital Blvd.
La mañana de este jueves otro trabajador de la construcción fue detenido en Fuquay-Varina sobre la calle Stewart.
De otro lado, Iván Almonte organizador comunitario, indicó a Enlace Latino NC que ha logrado hablar con las familias de nueve inmigrantes más arrestados el domingo; y ayer en Durham y Raleigh. “Algunos casos han sido arrestos colaterales. Es decir que iban buscando a una persona y se llevaron a otra. En otros casos tenían una orden de deportación previa. Nadie está a salvo” indicó.
Hasta el momento se han contabilizado 28 inmigrantes arrestados en Carolina del Norte en lo que va de esta semana.
En propiedad privada
Las detenciones ocurrieron en tempranas horas de la mañana. Fue cuando los inmigrantes se movilizaban en sus vehículos de camino al trabajo. O bien, cuando se alistan para entrar a laborar.
Tal fue el caso de Juan Carlos, un joven salvadoreño de 21 años. Desde hace cinco años vive en el estado. Siendo menor de edad, Juan Carlos dejó su país natal huyendo de la violencia. El joven fue arrestado en las afueras del restaurante donde trabajaba en Burlington. El arresto sucedió cuando acababa de llegar.
“El video de la cámara de seguridad muestra un agente de ICE, literalmente, tirando de él hacia fuera de un área privada del restaurante - una clara violación de la ley federal estipula que los agentes deben presentar una orden judicial para entrar en un área privada”. Fue lo que indicó la organización Siembra NC.
El grupo de defensa comunitaria también denunció que en los arrestos de los cuales ellos han sabido, los agentes no llevan una orden judicial. Además van vestidos de civil o con chalecos que solo dice “Police”. Se mueven en camionetas de color oscuro; con placas de otros estados y vidrios polarizados. “Hay que mirar si hay autos encendidos y desconocidos afuera de su casa o en la calle”. Fue lo que dijo a Enlace Latino NC, Andrew Garcés organizador comunitario.
Impiden comunicación
Siembre NC indicó que días antes de esta última oleada de detenciones el alguacil del condado de Alamance, Terry Johnson firmó un contrato con el ICE de $ 2.8 millones de dólares para rentar su cárcel a la agencia y mantener allí a los detenidos por inmigración. Desde entonces, casi todas las personas detenidas sobre el corredor de la I-85 y la I-40 han sido llevados a Graham, donde la comunicación ha estado plagada de dificultades.
“Han tratado de visitar a sus seres queridos, o por lo menos recuperar llaves de los coches que quedaron estacionados a lo largo de la vía pública, pero no ha sido posible”, señaló Garcés. “A algunos los dejan hacer una llamada y a otros no y eso no está bien”.
Garcés mencionó que otra de las irregularidades que han notado es que los inmigrantes no pueden ser visitados el mismo día en que son arrestados. “Si se apellida de una manera es un día y si se apellida de otra, es otro día. Es muy confuso. Además, se los están llevando muy rápidamente para Georgia”, indicó.
Otra forma para comunicarse
Igualmente, Garcés mencionó que, aunque es muy costoso, otra de las formas para comunicarse con los detenidos es a través de un sistema de llamadas de video, pero tampoco ha sido posible “Ellos (los agentes del centro de detención) han dicho que tiene fallas”, señaló.
Algunos de las familias que tuvieron ese problema fue la de Patricio Hernández Soriano de 44 años, quien vive en Winston Salem y quien fue detenido junto a tres compañeros de trabajo cuando se movilizan sobre la Jonestown Road. También fue el caso de Osveli Morales, de 23 años, quien llegó a Carolina del Norte hace seis años huyendo de la violencia de su natal Guatemala.

Video del arresto de Juan Carlos/ Cortesía Luigi Carannante