Esta historia ha sido publicada en colaboración con Enlace Latino NC/ Southerly. Es la primera entrega de una serie de dos partes.
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Traducción al español por Lidia Hernández Tapia (lidia.her64@gmail.com)
Carolina del Norte, Wake Forest- Durante más de la mitad de su vida, Santos Sevilla, de 38 años, ha vivido en Wellington Park, un vecindario de casas móviles en Wake Forest, Carolina del Norte. Se mudó allí a los 16 años con su hermano mayor, quien compró el remolque después de emigrar de Hidalgo, México. Cuando Sevilla se casó, su hermano le vendió la casa y Sevilla, que ha trabajado en jardinería desde que era un adolescente, pagó 300 dólares al mes para arrendar el terreno donde parqueaba su casa trailer.
Sevilla y su esposa hicieron una vida juntos en el parqueo de casas móviles, en una acogedora casa ubicada entre robles y pinos. Sus hijas, una de cuatro y la otra de año respectivamente, juegan con sus amigos del vecindario en el patio trasero donde el césped ha sido cuidadosamente cortado.
"Nunca he tenido un problema o una discusión con nadie", dijo Sevilla en español. El parque es un lugar seguro y le ha brindado una forma de "conectar con diversas culturas".
Pero en marzo de este año, Sevilla recibió una carta que lo cambió todo. El propietario de Wellington Park, George Mackie Jr., planeaba vender el terreno. Recibieron una segunda carta el 19 de julio, que les daba 180 días para abandonar el lugar. "No tenemos adónde ir", dijo Sevilla. "Esto nos ha sorprendido a todos".

Sin tener a dónde ir
Desde hace 22 años, Sevilla siempre ha pagado su alquiler a tiempo. Nunca ha tenido problemas con el dueño de la propiedad, ni siquiera ha tenido mucha comunicación. Sevilla dijo que él y su comunidad estaban "traumatizados".
El Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) ha extendido la moratoria federal de desalojos hasta el 3 de octubre de 2021.
Según el anuncio, la propiedad residencial se define como “cualquier propiedad arrendada con fines residenciales, incluida cualquier casa, edificio, casa móvil o terreno en un parque de casas móviles".
A la pregunta de si procedería a desalojar a los residentes de Wellington Park incluso con la extensión de la moratoria, Mackie dijo: "Estoy haciendo todo lo que está a mi alcance, de acuerdo con la ley".
Mackie, ex alcalde de Wake Forest firmó un contrato para vender el parque a Middleburg Communities, una firma de inversión inmobiliaria que, según su sitio web, ha adquirido o construido 20 mil apartamentos en el sur de los Estados Unidos por un valor de más de 2 mil 500 millones de dólares. Wellington Park tiene una extensión de 76 acres y según la evaluación del condado su valor se estima en unos 3 millones de dólares.
Southerly y Enlace Latino NC hablaron con Sevilla y otros nueve residentes del parque de casas móviles, donde viven residentes de etnicidad latina, personas blancas y afroamericanas.

Cerca de 50 familias afectadas
La iniciativa de desarrollo de Middleburg amenaza con desalojar y desplazar al menos a 47 familias de Wellington que no se lo esperaban. Pero Mackie, que cumplirá 80 años en un par de meses, asegura haberles dicho a algunos residentes hace al menos un año "que en verdad iba a terminar el trato con ellos".
Mackie dijo que su decisión de vender la propiedad, que compró hace más de 40 años, es por motivos personales. Su esposa enfrenta una enfermedad terminal y sus tres hijas no pueden atender el parque.
"No es nada personal contra [los residentes]", dijo. “Es porque tengo que ocuparme de mi familia. No me siento culpable. Lo siento, este es el momento de hacerlo porque estoy perdiendo a mi esposa".
Karen Widmayer, portavoz de Middleburg, dijo que el plan de desarrollo para Wellington Park incluye unas 260 viviendas de alquiler para hogares de una sola familia, incluidas cabañas independientes de dos y tres habitaciones y dúplex de una habitación". Ella dijo que aún no han determinado los precios de alquiler.
Sin embargo, rentar un apartamento de una habitación en una propiedad de Middleburg en Charlotte puede costar 1,315 dólares al mes y uno de tres habitaciones, 2,132 dólares.
El costo de mudarse sería inasequible para todos los residentes de Wellington Park, muchos de los cuales son de bajos salarios y además han perdido ingresos durante la pandemia.
Las casas móviles, también llamadas viviendas prefabricadas, en realidad no son móviles y traen consigo costosas tarifas de instalación y mudanza.
Sevilla dijo que tendría que pagar 16 mil dólares para mover su casa. Otros residentes estiman que les costaría unos 25 mil dólares para reubicarse en otro lugar.
Middleburg Properties se ha reunido con los residentes, aunque ninguna de las partes accedió a revelar lo que discutieron, más que la oferta de un posible bono de 5 mil dólares para cada familia. Los residentes dicen que eso no es suficiente.
Diez personas dijeron que el terreno más cercano a donde mudar sus casas podría estar en Louisburg o Youngsville, a unos 30 minutos de distancia. Esto también va a significar nuevos distritos escolares y viajes diarios más largos.
Ninguno de ellos tiene un plan para lo que viene; sienten que no tienen opciones. “No tenemos los recursos para mudarnos”, dijo Sevilla a nombre de su familia y de sus vecinos. "No estamos preparados".

Desarrollo urbanístico que juega con la vida de miles de familias en el país
El poblado de Wake Forest técnicamente se encuentra ubicado en tres condados, incluidos el condado de Wake y el de Raleigh. Este se ha convertido en un suburbio para Research Triangle Park, donde están las oficinas de grandes empresas farmacéuticas y tecnológicas. A medida que el rápido crecimiento y desarrollo de la población del Triángulo se expande a las ciudades vecinas como Wake Forest, que ha experimentado un crecimiento poblacional del 232 por ciento en las últimas dos décadas, las grandes empresas de desarrollo compran vecindarios de casas móviles.
Carol Pelosi es la editora de Wake Forest Gazette, el periódico local de la ciudad. Ella informó por primera vez de la posible venta de Wellington Park en marzo, después de que los residentes acudieran a ella con información.
Pelosi dijo que el ayuntamiento de Wake Forest está considerando nuevas políticas relacionadas con la vivienda asequible, pero la rezonificación de este "parque tan bien cuidado" eliminaría ese tipo de vivienda para docenas de personas.
“Aunque George [Mackie] como dueño de una propiedad tiene derecho a intentar hacer algo, eso no significa que pueda desplazar a tanta gente”, dijo Pelosi. "Sería la primera vez que nosotros [la ciudad] desplazamos a personas que viven en un terreno, en favor de un trato comercial".
Lo que está sucediendo en Carolina del Norte refleja lo que pasa con el desarrollo urbanístico en todo el país. "Hay un proceso paralelo aquí: a medida que las ciudades crecen, se expanden alrededor de estos parques y la tierra se vuelve más valiosa y hay un incentivo para la remodelación de esos espacios", dijo Esther Sullivan, profesora asociada de sociología de la Universidad de Colorado en Denver, quien ha escrito un libro sobre parques de casas móviles.
“Los concejales ven este uso de la tierra como un uso de la tierra estigmatizado, a pesar de que ofrecen vivienda asequible”, agregó. "Entonces, un parque que ha estado allí durante décadas, con varias generaciones de los mismos hogares que viven en viviendas estables y asequibles durante décadas, de repente se venden y se reconstruyen".
El portavoz de Middleburg confirmó que la venta de Wellington Park está bajo contrato, pero la junta de comisionados de la ciudad de Wake Forest tiene que votar sobre la rezonificación que permitiría el uso residencial mixto.
Patrick Reedy, un planificador urbano senior de Wake Forest, dijo que la junta discutirá el plan para la rezonificación en su reunión del 7 de septiembre.
Mackie no mencionó el problema de la rezonificación en sus cartas. Según la carta que envió en julio, planea rescindir todos los contratos de arrendamiento y cerrar el parque. Si los residentes no se van y mudan sus casas fuera de la propiedad dentro en un plazo de seis meses, escribió Mackie, "comenzaremos inmediatamente el proceso de desalojo".
Sin embargo, muchas de las casas en Wellington Park son móviles solo de nombre.
“No son vehículos recreativos. No son campistas. No están diseñadas para ser móviles una vez que se transportan por primera vez”, dijo Sullivan en una charla de TED Talk sobre las viviendas prefabricadas, el término que usa la industria para los parques de casas móviles, como comunidades invisibles. “Una vez instalados en un terreno, como cualquier otro hogar, se asientan allí”.
Sullivan dijo a Southerly y Enlace Latino NC que existe un desequilibrio entre la propiedad de la tierra y lo que a menudo pensamos como propiedad de la vivienda. “En verdad, el dueño de la propiedad posee todo el valor y tiene el poder en esta situación”, dijo.

Perderán todo
Katia Vara-Roebuck, organizadora comunitaria de ONE Wake, dice que al menos 20 familias en Wellington le han dicho que sus casas móviles son demasiado viejas para mudarlas y reinstalarlas. Como mujer latina, ella ha ayudado a los residentes de habla hispana a participar activamente en la organización.
El 17 de julio, 210 personas se reunieron para una conferencia de prensa en Wellington Park que organizaron ONE Wake, otros activistas y miembros de la Iglesia Episcopal de St. John, quienes compartieron una barbacoa y pudín de plátano en una mesa de buffet.
El residente Ronnie Jackson se paró en un podio detrás de una pancarta que decía “SALVEMOS EL PARQUE. NO, A LA REZONIFICACIÓN". Jackson lideró la presentación con citas anónimas de un cuestionario que respondieron otros residentes, algunos que han vivido en el parque durante más de 30 años.
A Jackson se le salieron las lágrimas mientras explicaba cómo una anciana iba a perder su remolque si trataba de moverlo, porque era demasiado viejo. Otra familia con un bebé recién nacido dijo que se quedarían sin hogar si se les obligaba a abandonar el parque.
"Los he leído todos", dijo frente a la multitud. "Cada vez que lo leo, me hace llorar".
Varios residentes tomaron el micrófono uno a uno, en inglés y en español. Gerald Burnett, un veterano de la guerra de Vietnam a quien le diagnosticaron cáncer recientemente, dijo que tener que mudarse "es una preocupación más grande para mí que luchar contra este cáncer".
Un estudiante de secundaria de 14 años habló después de él y dijo que la mudanza lo pone ansioso. Su hermana, Erika Sevilla Marcelo, de 22 años, le contó a la multitud que se graduó de la universidad durante la pandemia y que vivió en casa con su familia para ahorrar dinero.
“Como estadounidense de primera generación, la carga de encontrar un nuevo hogar recaerá sobre mí”, dijo.
Solo una comisionada de Wake Forest, Bridget Wall-Lennon, estuvo presente, pero no hizo ningún comentario público. Tampoco respondió a las solicitudes de comentarios a través de mensajes de voz.
Mackie, el propietario del parque de casas móviles no estaba presente, pero cuando se le contactó por teléfono, dijo que no estaba al tanto del evento. "¿Le gustaría que alguien pusiera una gran carpa, que hubiese cientos de personas en su tierra y ni siquiera pidiera permiso para hacerlo?"
Mackie no estuvo de acuerdo con las acciones de los residentes. "No puedo hacerme responsable de todo el mundo", dijo. “Siento una gran empatía por ellos. Pero hay un par de personas en un viaje de ego. No pueden usar aquello de la 'gente pobre' conmigo".

Hispanos representan aproximadamente el 13% de los propietarios de viviendas prefabricadas
Las viviendas prefabricadas, como remolques y casas móviles, son asequibles para las comunidades de bajos ingresos, especialmente para los residentes de origen latino que viven en el nivel de pobreza o por debajo de este límite.
La investigación de Sullivan muestra que, a nivel nacional, los hispanos representan aproximadamente el 13 por ciento de los propietarios de viviendas prefabricadas.
“Las viviendas prefabricadas por su naturaleza asequible son una vía crucial para la propiedad de vivienda de los hispanos”, dijo Sullivan.
Ivan Parra del Congreso de Organizaciones Latinas de Carolina del Norte (también conocido como el Latino Congress) ha hecho activismo en Carolina del Norte en temas relacionados con la población latina y la vivienda en particular durante décadas. “La vivienda asequible y de buena calidad es escasa para la comunidad de inmigrantes”, dijo.
“La comunidad inmigrante que es de clase trabajadora de primera o segunda generación, y tal vez no hable inglés o no tenga la documentación adecuada, sólo puede alquilar casas en malas condiciones. Como alternativa buscan una casa móvil".
En menos de 20 años el 70% de los propietarios serán latinos
Los datos y las proyecciones en torno a la propiedad de vivienda de los latinos muestran un aumento constante desde 2010 hasta hoy: la población latina es responsable de casi el 40 por ciento del aumento de propiedad de vivienda de la nación, según la Oficina del Censo de los Estados Unidos.
De acuerdo a una proyección de Urban Institute, entre 2020 y 2040, el 70 por ciento de los nuevos propietarios serán latinos.

Un informe de 2015 de la Asociación Nacional de Profesionales Hispanos en Bienes Raíces muestra que las ciudades de Durham y Chapel Hill juntas, en Carolina del Norte, tienen la mayor tasa de crecimiento de propietarios latinos en todo el país. Más del 13 por ciento de los propietarios de viviendas en Carolina del Norte eran dueños de casas móviles, y casi el 24 por ciento de ellos eran latinos
Según Sullivan, la mayoría de las compras de casas móviles y prefabricadas son en efectivo, lo cual coincide con lo que Parra ha escuchado de manera anecdótica de los propietarios latinos de Carolina del Norte durante décadas.
“El estigma en torno a las viviendas prefabricadas no permite que las personas vean lo que estas ofrecen a las familias”, dice Sullivan. "Les brindan una casa independiente, ese sueño americano, el jardín, varias habitaciones, todo lo que tienen las personas que viven por encima del umbral de pobreza y que no se cuestiona".
Es difícil encontrar datos sobre parques de casas móviles porque los gobiernos estatales y locales generalmente no recopilan esa información.
De acuerdo con la Oficina de Recuperación y Resiliencia de Carolina del Norte, que administra el programa de asistencia de rentas del estado, a las personas que presentaron solicitudes en 2020 y 2021 no se les preguntó el tipo de pago de alquiler que necesitaban, para "mantener la solicitud lo más simple posible". Según los criterios del CDC, cualquier persona que alquile un terreno para una casa móvil calificaría para la asistencia.

Crisis en medio de otra crisis
Algunos residentes de Wellington están jubilados, pero la mayoría de los entrevistados para esta historia trabajan para poder subsistir.
María Magaña vive en Wellington con sus tres hijos. Sus dos hijos mayores compraron una casa móvil de cuatro habitaciones con ella en enero de 2020, lo cual fue una mejora con respecto a la casa móvil individual que tenía. Les tomó tres meses encontrar una opción asequible, para que cada miembro de la familia finalmente tuviera su propia habitación.
Magaña dijo que pagaron 22 mil dólares por la casa, y que la están financiando a través de una hipoteca, más otros 26 mil dólares para instalarla en la propiedad. Antes de realizar la inversión, Magaña le preguntó al personal de Mackie si tenían planes de vender la propiedad. Le dijeron que no, que prosiguiera con la instalación del nuevo remolque en el terreno, e incluso que talara árboles para hacerlo. Magaña afirma que eso fue hace 16 meses, justo antes del inicio de la pandemia de Covid-19.
"Esto es algo que no me deja dormir por la noche", dijo Magaña en español. “Si el propietario me hubiera dicho 'Estoy pensando vender [la tierra]', entonces me hubiera quedado con mi trailer viejo. No es justo que pagué 26 mil dólares hace un año y que tendremos que pagar más. Esto me ha quitado el sueño. Y la mayoría de nosotros aquí somos de bajos ingresos".
Magaña limpia casas para subsistir, pero sus horas de trabajo se redujeron al inicio de la pandemia. Su hijo, Joel Magaña, perdió su trabajo en un restaurante y luego otro trabajo en un estacionamiento de autos. Consiguió un trabajo de intérprete de inglés a español en casa este mes, después de cinco meses de depender de los beneficios de desempleo.
"Nos golpearon con un puñetazo", dijo Joel sobre la posible venta de Wellington Park. "Esperamos que nos dejen quedarnos aquí".
"Espero que Dios mueva los corazones de estos comisionados y que no permitan la rezonificación", dijo María.
ONE Wake trató de pedir ayuda a ROC-USA (Comunidades de propiedad de residentes), una organización nacional sin fines de lucro que compra propiedades de parques de casas móviles para que los residentes puedan quedarse.
Según Wake Forest Gazette, Mackie no va a aceptar la oferta de ROC, que dicen que es la misma que la de Middleburg.
Los residentes de Wellington se reúnen todos los martes por la noche en el patio trasero de Bill Moran. Una semana después de la conferencia de prensa, habló con el grupo: “Nos unimos por algo que es lo correcto, que es bueno”, dijo. “Estamos defendiendo aquello en lo que creemos”.
La organización ha unificado a la comunidad de Wellington, incluso a una pareja de México que dice que de otra forma nunca habrían hecho amistad con sus vecinos angloparlantes.
“Esto es parte de un ciclo de falta de oportunidades que no se puede romper sin organización comunitaria”, dijo Parra del Congreso Latino.
La Junta de Comisionados de Wake Forest celebrará su próxima audiencia pública conjunta el martes 7 de septiembre a las 7:30 p.m. La agenda estará disponible desde el viernes de la semana antes. Los residentes que deseen dirigirse a la mesa directiva durante la audiencia deben seguir los protocolos de la reunión y, si quieren tratar un tema que no está en la agenda, se les recomienda llamar al secretario municipal con antelación al 919-435-9413.
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Esta historia contó con el apoyo de Solutions Journalism Network.