Población latina durante los primeros días de gobierno de Biden
Fotografía de archivo. 10 de abril 2013. Marcha en Washington D.C. por una reforma migratoria/Enlace Latino NC

Carolina del Norte, Raleigh- A pesar de los disturbios provocados en el Capitolio por seguidores del mandatario saliente Donald Trump, es un hecho que el 20 de enero Joe Biden asumirá sus funciones como nuevo presidente de los Estados Unidos.

Si bien para muchos latinos se abre una época de optimismo y esperanza, no son pocos los que miran al partido Demócrata con cierta desconfianza y estarán atentos a las resoluciones que se tomen durante los primeros días de gestión.

Específicamente, las miradas de la población latina estarán enfocadas en las transformaciones que Biden pueda llegar a desarrollar en materia migratoria, económica y sanitaria, tal como el presidente electo prometió durante su campaña electoral.

En diálogo con Enlace Latino NC desde Washington, Lía Parada, directora del equipo de Asuntos Gubernamentales del Center For American Progress (CAP) delineó el panorama que le espera a la población latina durante los primeros días de gobierno de Biden.

Prioridad número uno: contener la pandemia

“La prioridad número uno del nuevo gobierno apenas asuma será contener la pandemia”, explicó la especialista con acceso a altas fuentes de la política federal.

En ese sentido, todos los esfuerzos de Biden estarán puestos en acelerar el proceso de distribución de vacunas, especialmente para lograr inmunizar a la mayor cantidad posible de trabajadores esenciales, muchos de los cuales provienen de la comunidad latina y se desempeñan en actividades como la producción de alimentos o la construcción.

Según Parada, a pesar de lo ocurrido en Nebraska, donde los indocumentados que trabajan en plantas procesadoras de carne corren riesgo de no ser vacunados debido a su estatus migratorio, “el actual sistema de emergencia no pregunta estatus migratorio, y ese es el mismo plan que va a seguir el presidente Biden: cualquier persona, sin importar si cuenta con la ciudadanía o no, recibirá la vacuna cuando sea su turno”.

En lo que respecta a las medidas para contener la pandemia, Parada no imagina un escenario de cuarentenas más estrictas: “Pareciera que Biden se opone a una cuarentena más fuerte no porque los casos no estén subiendo sino porque la población se ha cansado de los encierros”.

Posibles cambios en materia migratoria 

Los cambios en la política migratoria de “mano dura” implementada por Donald Trump fueron una de las principales promesas de campaña de Joe Biden para seducir al electorado latino.

En efecto, el candidato demócrata se comprometió a llevar a cabo tres acciones para aliviar a la población migrante: restablecer el Programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por su sigla en inglés), que protege de la deportación a unos 800.000 jóvenes inmigrantes —los llamados “dreamers”—; garantizar el Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés) que resguarda a inmigrantes provenientes de países en riesgo; y enviar una reforma migratoria al Congreso que permita un camino a la ciudadanía para los más de 11 millones de inmigrantes indocumentados.

Sin embargo, Parada adelanta que no todas esas promesas se verán materializadas durante los primeros días de gobierno de Joe Biden.

“Nosotros esperamos que en el primer día de su presidencia Biden ponga nuevamente en pie tanto DACA como el TPS. Hay muchos países como El Salvador, que cuenta con 300,000 personas con TPS y podrían perderlo en unos meses debido a las decisiones de Trump, pero cuando Biden restablezca el programa podría protegerlos si los tribunales judiciales lo acompañan”, sostuvo Parada.

En su página web, Biden se comprometió a revisar “de inmediato” cada decisión de TPS tomada por la Administración Trump y a ampliar la cantidad de países que contarán con esa protección.

Parada estima que ese trabajo podría comenzar el 21 de diciembre, al día siguiente de la asunción. Lo mismo podría ocurrir con los beneficiarios de DACA, a quienes el nuevo presidente podría legalizar a través de una orden ejecutiva firmada apenas comience su administración.

Sin embargo, la situación podría ser muy diferente en lo que respecta a la reforma migratoria, la cual probablemente no se vea materializada en los inicios de la gestión.

A pesar de que en su último debate presidencial con Donald Trump Biden manifestó que “dentro de los primeros cien días, voy a enviar al Congreso de Estados Unidos un camino a la ciudadanía para los más de 11 millones de inmigrantes indocumentados”, desde el CAP explican que esa transformación demandará más tiempo.

“Aunque los demócratas hayan ganado las elecciones en Georgia y controlen el Senado y la Cámara de Representantes, esa mayoría podría no ser suficiente para sancionar una reforma migratoria debido a que se necesitaría una mayoría especial de 60 votos en el Senado para aprobar ese tipo de normas y el partido Demócrata  sólo contará con 50”, dijo Parada.

Más allá de esa demora, según la especialista hay otro cambio en la política migratoria que podría beneficiar a los latinos desde el primer día de gobierno de Biden. Se trata de el freno a las deportaciones que el presidente electo implementaría en los primeros 100 días de gestión. 

Tal como lo manifestó Parada, “Biden ha dicho que durante los primeros 100 días de su presidencia va a detener las deportaciones y eso va a dar una oportunidad para analizar qué políticas migratorias han funcionado y cuáles no en el Departamento de Seguridad Nacional”.

Sin embargo, según la especialista de Washington D.C., transformar el Departamento de Seguridad Nacional va a tomar muchísimo tiempo porque Trump lo ha dado vuelta por completo. “Creo que vamos a ver cambios, pero no tan rápido como todos quisiéramos”, se lamentó.

Por último, en lo que respecta a mejoras en materia migratoria durante los primeros días de gobierno de Biden, Parada pronosticó buenos augurios para los niños separados de sus familias en zonas fronterizas, aunque es probable que no se produzcan transformaciones estructurales rápidamente.

“Antes de la elección Biden dijo que iba a formar un comité para reunir a los padres con sus hijos. Los expertos que han ayudado a las familias separadas piden que les den una residencia a las familias separadas. Biden no ha hecho una declaración al respecto ni por sí ni por no, así que ese va a ser un tema para discutir en el futuro”.

Economía: ¿Aumenta el salario mínimo?

La crisis económica es otra de las cuestiones que más afecta a la población latina, uno de los sectores más golpeados por las consecuencias de la pandemia.

Al respecto, en su plataforma de campaña Biden se comprometió a “aumentar el salario mínimo a $15 por hora para que las personas puedan vivir con dignidad”, una iniciativa que podría beneficiar a muchos trabajadores latinos cuyos ingresos se encuentran en la base de la escala salarial.

Sin embargo, Parada estima que no habrá buenas noticias en ese sentido durante los primeros días de gestión. 

“Lamentablemente elevar el salario mínimo no va a ser algo que el presidente pueda hacer en sus primeros días de mandato. Es algo no está bajo su control ya que es una ley que debe pasar por el Congreso. Lo vemos igual de difícil que la reforma migratoria porque también requeriría 60 votos en el Senado y los republicanos están 100% en contra de elevar el salario mínimo. 

Acceso a la salud

Si bien Medicaid, el programa de seguros de salud para la población más vulnerable, es regulado por los gobiernos estatales, la administración federal tiene incidencia en una posible ampliación, la cual ha sido, de hecho, una de las principales promesas del partido Demócrata.

No obstante, al igual que lo que ocurre con la reforma migratoria y el aumento del salario mínimo, la mayoría demócrata en ambas cámaras no garantiza una ampliación de Medicaid.

Según Parada, a pesar de que en los primeros días de la administración de Biden podrían no registrarse cambios a nivel legislativo en lo que respecta a la cobertura de salud, sí es posible que el presidente solicite más fondos para el programa Medicaid y los distribuya entre las ciudades y estados que más los necesiten.

Deuda del partido Demócrata hacia la comunidad latina

Si bien buena parte de la comunidad latina le brindó su apoyo a Joe Biden, lo cierto es que muchos se inclinaron por Trump.

Es un hecho, también, que muchos simpatizantes del partido Demócrata quedaron desilusionados con la gestión de Barack Obama debido a la cantidad de promesas incumplidas.

En efecto, lo han llamado Obama “deportador en jefe” debido a que durante su administración fueron deportados más de 3 millones de inmigrantes.

Esa sombra de desconfianza también se cierne sobre Joe Biden, y por ese motivo todas las miradas de la comunidad estarán especialmente atentas a los primeros días de su mandato.

“Biden tiene una nueva oportunidad de recuperar la confianza de la población latina en el partido Demócrata. Esperamos que pueda cumplir con todo lo que prometió en campaña”, afirmó Parada.

La reforma migratoria que permita un camino hacia la ciudadanía para los casi 11 millones de inmigrantes indocumentados que hay en Estados Unidos fue la gran promesa incumplida de Barack Obama. Tal vez Biden pueda saldar esa deuda, pero difícilmente lo haga en los primeros días de gobierno.

Nicolás Baintrub es periodista argentino y hace parte del equipo de Enlace Latino NC. Cree en el periodismo como vehículo para contar buenas historias con compromiso social, rigor en la investigación...

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *