Carolina del Norte, Raleigh- Este mes se produjo un acontecimiento que evidencia un cambio en el escenario político de Carolina del Norte. Por primera vez en la historia, los votantes no afiliados a ningún partido superan tanto a la cantidad de demócratas como de republicanos. Y, entre todos los grupos étnicos, la comunidad latina es la que cuenta con un mayor porcentaje de “votantes independientes”.
Así lo confirmó a Enlace Latino NC la doctora Rebecca Tippett, directora de Carolina Demography en el Centro de Población de UNC-Chapel Hill.
“El 44% de los votantes latinos registrados no están afiliados, seguidos por un 41% de demócratas y un 14% de republicanos. Esta proporción es mayor que la de los votantes blancos (36%) o negros (20%) en el estado”, explicó la especialista por correo electrónico.
Según Tippett, uno de los motivos por los cuales los hispanos tienen una tasa tan alta de votantes no afiliados podría deberse al bajo promedio de edad de nuestra población. Es que, según un trabajo publicado por los profesores Bitzer, Cooper, Manzo y Roberts, los votantes más jóvenes son mucho más proclives a inscribirse como no afiliados.
De hecho, el promedio de edad de los votantes no afiliados es de 45 años, mientras que el de los demócratas es de 51 y el de los republicanos de 53.
“Cuando se compara con los votantes blancos, la tasa general de votantes no afiliados entre los votantes latinos se debe principalmente a la edad relativa de los votantes latinos en comparación con los blancos”, indicó Tippett.
De todas formas, aclaró que incluso dentro de personas de la misma edad, los votantes latinos son entre 2 y 3% más proclives a inscribirse como no afiliados que los blancos.
¿Qué quiere decir “votantes no afiliados”?
Al momento de inscribirse para votar, las personas deben informar si desean afiliarse a algún partido o si prefieren mantenerse como no afiliados.
Las elecciones primarias funcionan como un filtro para seleccionar a los candidatos que podrán competir en las elecciones generales. Durante las elecciones primarias los votantes que se registraron como afiliados a un partido político reciben una papeleta que sólo incluye los candidatos de ese partido. Los votantes no afiliados, en cambio, pueden elegir la papeleta de cualquier partido que tenga primarias.
En otras palabras: si alguien se registra como afiliado a un partido, sólo puede votar en las elecciones primarias de ese partido. En cambio, si se registró como no afiliado, puede votar por los candidatos del partido que quiera.
De todas formas, durante las elecciones generales tanto afiliados como no afiliados pueden votar por los candidatos del partido que prefieran.
Cambio histórico
Esta tendencia dentro de la comunidad latina se enmarca dentro de un cambio más profundo que está atravesando Carolina del Norte. Históricamente, en el estado el grupo mayoritario de votantes estaba afiliado al partido demócrata, seguido por los republicanos y en tercer lugar por los no afiliados.
Esa situación cambió hace algunos años, cuando los no afiliados superaron a los republicanos. Pero la gran novedad es que el mes pasado los no afiliados superaron también a los demócratas.
Actualmente, según datos de la Junta Electoral de Carolina del Norte, hay 2,524,112 de personas inscritas para votar como “no afiliadas”, 2,500,375 inscritas como demócratas y 2,199,189 como republicanas.
¿Por qué partido se inclinan los votantes no afiliados?
Con más de 2,5 millones de votantes no afiliados en todo el estado, la gran pregunta que se hacen todos los operadores políticos es ¿a quién votan los no afiliados?
Ocurre que, a todas luces, el voto de los no afiliados podría definir las elecciones en el estado.
Para Tippett se trata de una pregunta clave pero que excede su campo de investigación. En ese sentido, recomienda los trabajos del doctor Michael Bitzer al respecto.
Justamente en uno de sus informes, Bitzer sostiene que el grupo de votantes no afiliados está equitativamente dividido en sus preferencias partidistas.
Sin embargo, el voto de muchos no afiliados podría ser oscilante. Es decir, mientras que un grupo de los no afiliados votaría siempre por los demócratas o por los republicanos, un gran número de ellos podría votar en una elección por un partido y en la siguiente por el otro.
En el caso de los no afiliados hispanos, en cambio, la tendencia parece indicar una preferencia por el partido demócrata: en las últimas primarias el 74% de los latinos no afiliados votó por candidatos demócratas y apenas el 26% por republicanos.
Para Bitzer, los no afiliados no son republicanos o demócratas “escondidos en el placard”. Tampoco son necesariamente conservadores o liberales. Al contrario, tienen sus propias ideas y creencias políticas. Se ubican en algún punto intermedio entre ambos partidos.
¿Cuál será el partido que logre interpretar mejor los deseos de los no afiliados? Los especialistas aún no pueden asegurarlo. Pero lo que sí puede decirse con certeza es que, quien lo consiga, tendrá buenas chances de imponerse en las urnas.