Manifestante afuera de la Corte Suprema con una pancarta exigiendo mapas justos
Cortesía Common Cause

Carolina del Norte, Charlotte – Los jueces de la Corte Suprema federal comenzaron a evaluar este miércoles 7 de diciembre, el caso de Carolina del Norte denominado “Moore vs Harper”, que podría dejar a las legislaturas estatales prácticamente sin control al hacer reglas para las elecciones del Congreso y la presidencia. 

Los argumentos orales se extendieron por espacio de tres horas, y cada uno de los nueve jueces de la Corte Suprema investigó las líneas de poder en cuestión y los roles que las legislaturas estatales, los tribunales estatales, el Congreso de los Estados Unidos y los tribunales federales están facultados para desempeñar. 

Le puede interesar:

Control de las leyes de elecciones federales

El control sobre el espectro completo de las leyes que rigen las elecciones federales está potencialmente en juego.

Incluidas las leyes de votación que requieren una identificación con fotografía, las votaciones anticipadas, las reglas de votación por correo y el poder de dibujar mapas electorales del Congreso. 

El alcance de esta demanda preocupa a las personas que temen que la intención partidista y la supresión de votantes se vuelvan más pronunciadas si el Tribunal Supremo del país se pone del lado de los republicanos de Carolina del Norte que impulsan el caso.

El caso “Moore vs Harper”

El caso “Moore vs Harper”, llamado así por el presidente de la Cámara de Representantes de Carolina del Norte, Tim Moore, y Rebecca Harper, una votante que, junto con varios grupos progresistas como “Common Cause”, demandó a Moore y a otros republicanos el año pasado por mapas electorales elaborados por la mayoría republicana de la legislatura estatal. 

La Corte Suprema del estado se puso del lado de Harper y descartó esos mapas, lo que finalmente llevó a los republicanos de Carolina del Norte a llevar este caso a la Corte Suprema de EE. UU. 

El miércoles, a la vez que la Corte escuchaba los argumentos, la organización “Common Cause NC”, alzaron sus voces junto a varios líderes de grupos progresistas con el lema “People Over Politics” o “La Gente Sobre los Políticos”, frente al edificio del Tribunal en Washington D.C., y en distintas ciudades de Carolina del Norte como Raleigh y Charlotte. 

La teoría de la legislatura estatal independiente

Un abogado de los grupos que se oponen a los legisladores de Carolina del Norte advirtió sobre el caos si el Tribunal Superior adopta la “teoría de la legislatura estatal independiente” subyacente en el caso, que nunca ha adoptado, pero fue citada con aprobación de cuatro de los jueces que son conservadores. 

Esa teoría sostiene que, debido a que la Constitución de los EE. UU. dice que las legislaturas estatales y el Congreso determinan los “tiempos, lugares y formas” de las elecciones federales, los tribunales estatales no pueden recurrir a las constituciones estatales para declarar ilegales esas reglas y hacer cambios sustanciales. 

“Esta es una teoría con grandes consecuencias”, dijo la jueza federal Elena Kagan, permitiendo las “formas más extremas de manipulación de las legislaturas”.

Qué consecuencias tendría un fallo del caso a favor de los republicanos

De darse un fallo amplio, podría amenazar cientos de leyes electorales a nivel nacional y requerir reglas separadas para las elecciones federales y estatales en la misma boleta.

Así como conducir a nuevos esfuerzos para rediseñar los distritos electorales para maximizar la ventaja partidista.

Por su parte, la jueza Amy Coney Barrett, dijo que, el resultado buscado por los republicanos de Carolina del Norte dejaría a los jueces con “límites difíciles de trazar”.

“Cláusula de los electores”

La decisión de la Corte en el caso de Carolina del Norte también podría sugerir cómo los jueces tratarían con otra parte de la Constitución.

Esta no está en discusión en el caso actual, que otorga a las legislaturas la autoridad para decidir cómo se nombran los electores presidenciales. 

Esa disposición, la “cláusula de los electores”, fue central en los esfuerzos para tratar de anular el resultado de las elecciones presidenciales de 2020 en varios estados muy disputados.

Cualquier ley relacionada con las elecciones federales podría verse afectada por la decisión del Tribunal, incluidas las leyes de identificación de votantes, los horarios de votación anticipada y las reglas de votación por correo. 

La anulación de mapa partidista 

La Corte Suprema de Carolina del Norte anuló los distritos trazados por republicanos que controlan la legislatura porque favorecían en gran medida a los republicanos en un estado altamente competitivo. 

El nuevo mapa trazado por la Corte que se usó en las elecciones de medio termino, el 8 de noviembre para el Congreso, produjo una división de 7 a 7 entre demócratas y republicanos.

Carolina del Norte se encuentra entre los seis estados en que en los últimos años los tribunales estatales han dictaminado que la redistribución de distritos excesivamente partidista para el Congreso violó sus constituciones estatales.

Los otros son Florida, Maryland, Nueva York, Ohio y Pensilvania.

Los legisladores republicanos que impulsan el caso pidieron a la Corte Suprema que verifique la Corte Suprema de Carolina del Norte, que argumentan, se extralimitó en su autoridad a principios de este año al anular los mapas de redistribución de distritos de la legislatura controlada por ellos.

Caso desencadenado tras los resultados del Censo 

Después de meses de informes legales de ida y vuelta, que incluyen presentaciones de más de 60 personas y organizaciones de todo el país que no están involucradas en el caso, pero están preocupadas por su impacto, el caso Moore vs Harper llegó finalmente ante el Tribunal Superior de la Nación.

Pero debido a que un proceso de redistribución de distritos de Carolina del Norte desencadenó el caso, gran parte de la atención se ha centrado en ese proceso, que se lleva a cabo cada 10 años después del Censo realizado en 2020, para dar cuenta de los cambios de población.

“Gerrymandering”

Debido a que los legisladores que dibujan los mapas de votación tienen un conocimiento detallado sobre los patrones de votación, pueden predecir los resultados de las elecciones al Congreso en función de dónde están las líneas. 

Eso hace que las elecciones sean predecibles. Lo anterior, empodera a los cartógrafos para impulsar su partido y, por lo tanto, el poder de su partido en el Congreso.

Esto se llama “gerrymandering”, y la nación ha tenido una larga discusión sobre si es legal y quién decide hasta dónde pueden llegar los cartógrafos.

Periodista multimedia de origen colombiano, con más de 14 años de experiencia en medios de comunicación escritos en Carolina del Norte. Su trabajo periodístico ha sido reconocido con 16 Premios José...

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *